domingo, 22 de enero de 2017

Lo que dice Dios a los adolescentes: Digamos NO a las dudas del enemigo.

En estos últimos dias, me hablaba una hermana muy preocupada: ¿cómo hago para encarar ciertos temas con los adolescentes?

Escuchamos frecuentemente decir "la adolescencia es una etapa difícil", y los que ya hemos pasado por esa edad sabemos que es cierto. 

Entendamos por qué:
La adolescencia es una etapa entre la niñez y la juventud, esa etapa se llama PUBERTAD. Es el momento en donde uno no sabe si sentirse niño/a o sentirse un joven. Donde no sabemos si seguir jugando cómo antes o interesarnos por las "cosas de grandes". Es una etapa donde la identidad se pierde por momentos, y no sabemos hacia dónde disparar. Es ahi, donde más que nunca el enemigo hace de las suyas, por ser una etapa de cambios, de transición... comienzan las dudas.


La duda NUNCA viene de Dios, viene de las tinieblas, donde mora Satanás. En los adolescentes, esto es una constante, el enemigo infunde temores y dudas, que sólo tomados de la mano del Señor podemos superar.


1. Soy hombre o mujer? El mundo está plagado de contaminación, y contra esa corriente luchamos. Tanto en los niños como en las niñas que están entrando a la adolescencia, comienzan a sentir cambios en muchos aspectos: el cuerpo, la voz, algunos intereses que antes no tenían, etc. Ese momento Satanás aprovecha y tira un veneno potente a las mentes de los adolescentes: realmente sos una niña? realmente te sentís un niño? La homosexualidad no es aprobada por Dios,  viene de una mente reprobada según Romanos 1:26 al 32, son pasiones vergonzosas que Dios no aprueba, sino condena y rechaza. Cubramos a nuestros adolescentes en oración y permitamos que la Palabra de Dios responda cada inquietud. Si sos un adolescente, o joven, y comenzaste a tener estas dudas, Dios no se equivoca, no te hizo varón para después convertirte en mujer, ni te hizo mujer para convertirte en varón. Estas son mentiras del enemigo para alejarte de Dios. Sin embargo, Dios sabe tu necesidad, sabe lo que sentís, sabe lo que te pasa, porque El te ama.

2. Nadie me quiere, Nadie me entiende: Hay una altísima tasa de suicidio en adolescentes, sólo en Paraguay el número va en aumento desde el año 2004, más de 300 muertes por año y un número mayor de intentos de suicidio. Miremos este dato: El 80% de los que han cometido suicidios están entre los 14 y 19 años, en el 2004 murieron 326 adolescentes y en el 2005 fueron 308 jóvenes, mientras que en el año 2006 fueron 346 muertos. El número sigue aumentando.
Como hijos de Dios tenemos de donde sostenernos: no existe mayor prueba de amor de parte de Dios que el hecho que haya enviado a su Hijo Jesucristo a morir por nosotros. Satanás quiere destruirnos, quiere cegar la vida de los adolescentes y jóvenes porque son ellos los que pueden usar su vigor para la gloria de Dios, quiere que sus vidas llenas de fuerza se terminen. Satanás tiene muchas mentiras que pueden parecer ciertas, ese es su trabajo: que la mentira parezca verdad, por eso no hay mejor arma que la que Dios nos da, el refugiarnos en sus verdades y promesas: Nosotros le amamos a Él porque Él nos amó primero (1 Juan 4:19). ¿Se olvidará la mujer de lo que dio a luz, para dejar de compadecerse del hijo de su vientre? Aunque olvide ella, yo nunca me olvidaré de ti. He aquí que en las palmas de las manos te tengo esculpida; delante de mi están siempre tus muros. (Isaías 49:15-16). Las dudas vienen del enemigo, Dios es un Dios de verdad y amor, te ama A mis ojos fuiste de gran estima, fuiste honorable, y yo te amé (Isaias 43:4) Si aún dudás del amor de Dios, ruego en este mismo instante que su amor te inunde de tal manera que derribe todos los argumentos del maligno, y que tu corazón rebose de Su Presencia porque el Perfecto Amor echa fuera el temor (1 Juan 4:18)

3. Es momento de empezar un noviazgo? Dios planeó desde el inicio, en Génesis, el matrimonio entre el hombre y la mujer. Dios vio que Adán necesitaba una compañera, por eso hizo a Eva. Desde esa figura, sabemos que és la voluntad de Dios que conozcamos a la persona que El mismo preparó para nosotros. Pero, como sé si es el tiempo? El mundo se encargó a lo largo del tiempo, de desvirtuar esta figura tan sublime que Dios diseñó. Si entendemos que el matrimonio es parte del Plan Perfecto de Dios, también sabremos que el noviazgo es la antesala del matrimonio. No existe una edad determinada para comenzar una relación de noviazgo, pero sí sabemos que si no es para un matrimonio, mejor no iniciarlo.

En la adolescencia hay cosas mejores de qué ocuparnos, y Dios nos ayuda en ese proceso. Es el tiempo perfecto para fomentar amistades con nuestros pares, de compartir gustos en común. En la adolescencia no tenemos un abanico de responsabilidades como cuando llegamos a la juventud o la adultez. La adolescencia no es el mejor momento para iniciar un noviazgo, por muchas razones: una ya mencionamos, el noviazgo aprobado por Dios es el noviazgo que da lugar al matrimonio, y en la adolescencia NO estamos aún listos para eso. Otra razón es que aún estamos en tiempo de cambios durante esta etapa, un día nos gusta algo, al otro día no nos gusta, un día estamos contentos, otro día ya no, nuestros sentimientos y pensamientos aún no se definen porque estamos dejando la niñez para entrar a la juventud. Una razón más: no debemos dar lugar al enemigo! Satanás dice a los adolescentes que mientras más jóvenes pierdan su virginidad, son más valientes. MENTIRA! Dios dice no des a los extraños tu honor, y tus años al cruel...  y llores al final cuando se consuma tu carne y tu cuerpo y te lamentes por no haber oído el consejo (Proverbios 5:7al13) Tu honor es para tu esposo querida adolescente, tu honor es para tu esposa amado adolescente, no permitas que Satanás te engañe diciendo que sos un perdedor o sos una cobarde por no entregar tu virginidad. El sexo es aprobado por Dios dentro del matrimonio, fuera de eso, es pecado... y todo pecado es para dolor y amargura. 

Has tenido alguna de estas dudas? Dios es un Dios de verdad, y no miente. Las dudas no vienen de Él. El trato que quiere tener contigo es para bendecirte, para llenarte de su amor y para levantarte alto. No permitas que Satanás te llene de sus mentiras, y si has escuchado alguna de ellas, corre con urgencia a la presencia del Padre para que su presencia te llene de su gozo, su alegría y su amor.

Diviértete, joven, ahora que estás lleno de vida; disfruta de lo bueno ahora que puedes. Déjate llevar por los impulsos de tu corazón y por todo lo que ves, pero recuerda que de todo ello Dios te pedirá cuentas. Aleja de tu mente las preocupaciones y echa fuera de ti el sufrimiento, porque aun los mejores días de la juventud son vana ilusión. Eclesiastés 11:9-10 (DHH)


Que el Señor te bendiga!