sábado, 19 de septiembre de 2015

Sansón: de la derrota a la victoria.

Jueces 16: 28 al 30 "Entonces clamó Sansón a Jehová, y dijo: Señor Jehová, acuérdate ahora de mí, y fortaléceme, te ruego, solamente esta vez, oh Dios, para que de una vez tome venganza de los filisteos por mis dos ojos.  Asió luego Sansón las dos columnas de en medio, sobre las que descansaba la casa, y echó todo su peso sobre ellas, su mano derecha sobre una y su mano izquierda sobre la otra. Y dijo Sansón: Muera yo con los filisteos. Entonces se inclinó con toda su fuerza, y cayó la casa sobre los principales, y sobre todo el pueblo que estaba en ella. Y los que mató al morir fueron muchos más que los que había matado durante su vida."
 

Conocemos la historia de Sanson, el ultimo juez registrado en este libro, fue levantado para librar a su pueblo de la opresion de los filisteos, sin embargo encontramos que entre fracasos y caidas llego a esta instancia: sin ojos, sin fuerzas, siendo de burla y escarnio a los enemigos. Pero en medio de esa circunstancia hace un clamor a su Dios, pues reconocio que era la fuente de su fuerza.. Asi es el creyente que a veces queda dormido en los brazos de Dalila, bajo engaños del enemigo cae en sueño profundo, es arrastrado, humillado, escarnecido, queda sin vision de las cosas espirituales, pero en medio de su condicion clama a Dios "ACUERDATE AHORA DE MI Y FORTALECEME". Cuanto anhela nuestro Padre que hagamos este clamor en medio de esa cirunstancia en donde estemos, si hemos tropezado y caido, si hemos descuidado nuestro llamamiento asi como Sanson, si hemos ido tras cosas vanas dejando lo mejor del Señor de lado, ahora es momento de clamar y pedir la fuerza, para que el enemigo sea el derrotado, no nosotros.
Encontramos hombres como Jonas (Jonas 2:1-2) y Manases (2do Cronicas 33: 1-2, 12-13) que luego de una gran caida, despues de su fracaso, se levantaron y tomaron la fuerza del Señor, clamaron a El y Dios les oyo.
Sanson pareceria que esta terminando su carrera en derrota, pero leemos el verso 30 "Y los que mató al morir fueron muchos más que los que había matado durante su vida."  Se apoyo por los pilares de la casa donde los enemigos de Israel se burlaban de El y de su Dios, pero ni ellos sabian que les esperaba.
Cuantas veces somos arrastrados por los engaños del enemigo en cualquier forma que se presente, nos hace perder muchas cosas, como el hijo prodigo, pero leemos en Miqueas 7:7-8 "Mas yo a Jehová miraré, esperaré al Dios de mi salvación; el Dios mío me oirá. Tú, enemiga mía, no te alegres de mí, porque aunque caí, me levantaré; aunque more en tinieblas, Jehová será mi luz"  El enemigo se burla de nuestras caidas, pero podemos declarar con confianza No te alegres tanto, ya que volvere a levantarme! y es el enemigo quien retrocede avergonzado, no nosotros.
Hay tantos como Sanson hoy, que quizas estan sin ojos, sin fuerzas, siendo escarnecidos por el enemigo, muchos quizas fueron llamados a un ministerio pero decayeron, muchos que eran fieles al principio ahora no estan, muchos que desde niños escucharon la Palabra ahora estan siendo de risa y burla al enemigo. Muchos como Sanson son la diversion del enemigo, pero es hora que los ayudemos a palpar las columnas de la casa donde estan los filisteos y a derribar con la fuerza del Señor toda altivez que se levanta, todo argumento, toda astucia del maligno. Lo derribamos por la fe, como hizo Sanson y fue nombrado entre los heroes de Hebreos 11 como uno de los que sacaron fuerzas de debilidad.. Hoy podemos levantarnos y levantar a los que estan caidos, levantarnos con nuevas fuerzas para que el enemigo no nos engañe, pisar fuerte como el buey, y no ser arrastrados bajo ninguna astucia del maligno, asimilar la verdad que es la que nos afirma... es el enemigo quien esta destruido, no nosotros. Hemos sido llamados a victoria por que el Señor ya gano todo en la cruz.